El Camazotz
Considerado como el Dios Murciélago por diferentes culturas, el Camazotz forma parte de la mitología Maya, Zapoteca y Azteca, entre otras. En el Popol Vuh, era el nombre común referido a los monstruos similares al murciélago encontrados por los héroes gemelos mayas Hun Ahpú e Ixbalanqué durante sus pruebas en el mundo subterráneo de Xibalbá.
Extracto Popol Vuh:
“Hun Ahpú e Ixbalanqué fueron conducidos entonces a la Casa de los Murciélagos, que estaba repleta de chupadores de sangre. Aquella era también la morada de Camazotz, un gran animal que daba muerte como Chaquitzam, es decir, con la velocidad de una flecha, y así mataba a todo el que llegaba ante su presencia.
Los dos hermanos entraron en la casa, pero durmieron en el interior de sus cerbatanas, y de este modo los murciélagos no pudieron morderles. Sin embargo, como veremos, uno de ellos fue derrotado por Camazotz, que vino del Cielo y con el que tuvo que enfrentarse: no logró evitar que lo dominara el temor cuando hizo su aparición este gran chupador de sangre.
Los murciélagos organizaron su consejo y durante toda la noche estuvieron chillando y revoloteando: quilitz, quilitz, decían, que en su lengua viene a ser: «los mataremos, los mataremos».
Más tarde se fueron sosegando y llegado un momento ninguno se movía. Algunos estaban posados sobre la punta de la cerbatana. «¡Parece que ya amaneció!», le dijo Ixbalanqué a Hun Ahpú. Y este último, queriendo ver si así era, asomó la cabeza por la boca de la cerbatana. Apenas vio al gran Camazotz cuando este lo decapitó, y el cuerpo quedó dentro de la cerbatana mientras la cabeza rodaba por el suelo.
«¿Qué amaneció o no?», peguntó Ixbalanqué. Pero Hun Ahpú ya no se movía”.
Camazotz está formado por las palabras en K’iche’ kame, que significa “muerte”, y sotz’, que significa “murciélago”.
Investigadores indican que el culto de Camazotz pudo haber iniciado alrededor de 100 a. C. entre los zapotecas de Oaxaca, México, quienes veneraban a un monstruo antropomórfico con cuerpo de hombre y cabeza de murciélago. Hay evidencia actual que apoya que el mito de Camazotz puede haberse extendido debido a los murciélagos vampiro, alcanzando México, Guatemala y áreas de Brasil.
En el museo de Copán (Honduras) se encuentran varias representaciones de este Dios, uno de los más temidos de la mitología en diversas culturas ancestrales.