El presidente anunció su intención de eliminar órganos autónomos, incluyendo la Cofece e IFT, creados para salvaguardar la competencia económica y contrarrestar decisiones ejecutivas.
El IFT fue creado hace ocho años para garantizar y fomentar la competencia sana entre diversos sectores económicos, también ha servido como contrapesos a las decisiones del Poder Ejecutivo, desde una perspectiva técnica y jurídica.
El Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova, en una reunión anterior enfatizó que estos organismos son fruto de la lucha ciudadana por controlar el poder político.
“Para decirlo con claridad, los organismos constitucionales autónomos son el resultado de la lucha ciudadana para ampliar su control sobre el ejercicio discrecional del poder político y democratizar el mismo” dijo el Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello.
Sin embargo, el presidente reveló planes para su desaparición, alegando revisión exhaustiva de sus funciones.
“Nosotros también estamos revisando con lupa lo que hacen estos organismos, al grado que voy a proponer en el paquete de iniciativas de reforma, que desaparezcan todos estos organismos que crearon para proteger a particulares”, menciona AMLO.
Durante la conferencia matutina, el mandatario expresó su preocupación por la existencia de organismos que, según él, protegen intereses privados. En su propuesta de reforma, destaca la exclusión de la CNDH, enfatizando su intención de no afectar su estructura.
Entre los órganos señalados para desaparición, destaca el IFT. La crítica principal radica en su falta de autonomía frente a empresas particulares, a pesar de financiarse con fondos públicos.
El presidente alega que la eliminación de estos órganos no perjudicará a los trabajadores, se plantea así la creación de un “gobierno alternativo” sin afectar empleos de base, pero con un cambio estructural en la administración pública.
El INAI también figura en la lista de instituciones propuestas para su eliminación. El presidente, visiblemente molesto, declaró que es inaceptable mantener organismos que, según él, solo simulan acciones y no han demostrado resultados. Subrayó su intención de optimizar el gobierno, reduciendo costos y mejorando la eficiencia, al tiempo que aseguró que no habrá despidos.
En una perspectiva de ahorro, el presidente insistió en analizar qué organismos desaparecerán. La premisa es mantener un gobierno eficiente sin cargar al pueblo con gastos innecesarios. Estas propuestas generan controversia, planteando interrogantes sobre el futuro de la rendición de cuentas y la autonomía en México.