Una noche de gloria inconclusa en Las Vegas
El MGM Grand Garden Arena fue testigo de una noche histórica el pasado sábado 20 de julio de 2025, cuando el legendario boxeador filipino Manny Pacquiao regresó al cuadrilátero a los 46 años para enfrentarse al campeón mundial Mario “El Azteca” Barrios por el título del peso welter del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Sin embargo, lo que prometía ser una epopeya culminó en un empate mayoritario, dejando el cinturón en manos de Barrios y la gloria suspendida en el aire para Pacquiao.


Manny Pacquiao: El retorno del guerrero

Después de cuatro años de retiro y recién ingresado al Salón de la Fama del Boxeo Internacional, Manny Pacquiao volvió al ring con el objetivo de convertirse en uno de los campeones mundiales de mayor edad en la historia del boxeo profesional. Inspirado por figuras como Bernard Hopkins y George Foreman, el filipino intentó añadir un último capítulo de oro a su legendaria carrera.

Pacquiao, con un impresionante récord de 62 victorias, 8 derrotas, 3 empates y 39 nocauts, enfrentó a un rival 16 años más joven que él. Desde el primer asalto demostró que su técnica y experiencia siguen vigentes. Con combinaciones explosivas y una ofensiva intensa, arrancó los primeros rounds como en sus mejores tiempos.


Mario Barrios: Respeto, estrategia y retención del título

Mario Barrios, con marca de 29-2-2 y 18 nocauts, llegó al combate como campeón del CMB, pero con dudas luego de sus últimas dos peleas, donde apenas logró un empate ante Abel Ramos y una victoria poco convincente frente a Fabián Maidana.

A pesar de haber sido personalmente seleccionado por Pacquiao para esta pelea, Barrios no subestimó a la leyenda filipina. En el inicio del combate, mostró precaución y respeto, incluso conteniéndose en algunos asaltos intermedios. Pero fue esa misma estrategia la que le permitió sobrevivir a los embates iniciales y resurgir con fuerza en los últimos rounds, cuando Pacquiao comenzaba a mostrar signos de agotamiento.


Así fue el combate: round por round

Primeros asaltos: Dominio de Pacquiao
Desde el campanazo inicial, Pacquiao salió con todo. Sus combinaciones rápidas, especialmente su izquierda entre los guantes de Barrios, generaron estragos. Conectó golpes limpios al rostro y cuerpo de su oponente, provocando la ovación del público, que mayoritariamente estaba de su lado.

Asaltos intermedios: La experiencia vs. el físico
Sin embargo, el ritmo frenético pasó factura. La edad comenzó a notarse: Pacquiao ralentizó sus movimientos, y aunque su técnica seguía siendo precisa, sus piernas ya no respondían como antes. Barrios aprovechó la situación para tomar la iniciativa con ganchos al hígado y combinaciones que poco a poco igualaron el marcador en las tarjetas.

Últimos asaltos: Barrios aprieta el paso
En el décimo round, el mexicoamericano salió con todo. Su esquina le exigía mayor agresividad, y él respondió soltando golpes con mayor frecuencia y potencia. La leyenda resistía, pero el desgaste era evidente. Aun así, Pacquiao siguió lanzando golpes peligrosos, demostrando que aún tiene gasolina en el tanque.


Decisión polémica: empate mayoritario

El combate concluyó con dos jueces marcando 114-114 y uno favoreciendo a Barrios 115-113, lo que derivó en un empate mayoritario. De esta forma, Barrios retuvo su cinturón del CMB, mientras que Pacquiao salió sin la recompensa que tanto anhelaba.

El resultado dejó una sensación mixta entre los 13,107 asistentes al MGM Grand, muchos de ellos esperanzados de ver al filipino coronarse nuevamente. Las redes sociales estallaron con opiniones divididas, algunos celebrando la resistencia de Barrios, y otros cuestionando si realmente hizo lo suficiente para conservar el título.


Reacciones posteriores al combate

Manny Pacquiao: “Quiero la revancha”
Pacquiao fue claro en su mensaje tras la pelea. Aunque no confirmó si seguirá activo de forma regular, dejó abierta la puerta para una revancha directa contra Barrios. “Hice todo lo posible. Fue una pelea dura. Creo que merecemos otra oportunidad”, expresó el filipino.

Mario Barrios: “Fue un honor y estoy listo para volver a enfrentarlo”
Por su parte, Barrios reconoció la calidad de su rival y la magnitud del evento. “Es una leyenda. Esta pelea fue diferente a cualquier otra. Si el público lo quiere, yo también quiero esa revancha”, afirmó el campeón, dejando en claro que no subestima el legado de su oponente.


¿Qué sigue para Manny Pacquiao?

Con esta actuación, Manny Pacquiao ha demostrado que aún puede competir al más alto nivel, incluso contra campeones en activo. Si bien la edad le impone límites físicos, su técnica, experiencia y espíritu guerrero siguen intactos. Si logra mejorar su condición física para una revancha, podría buscar hacer historia nuevamente.

Una victoria en un segundo combate lo convertiría en el campeón mundial de peso welter más longevo, superando a figuras como George Foreman. ¿Lo veremos nuevamente sobre el ring antes de que termine 2025?


El legado continúa

Manny Pacquiao ya es una leyenda viviente del boxeo. Ha sido campeón en ocho divisiones distintas, un logro único en la historia del deporte. Su regreso al ring no sólo demuestra su pasión y compromiso, sino que también inspira a nuevas generaciones de pugilistas.

En tanto, Mario Barrios, aunque no salió con una victoria clara, mantiene su cinturón y suma una defensa más a su carrera. Sin embargo, aún queda por verse si podrá consolidarse como una figura dominante en la división welter, especialmente si se concreta la revancha con Pacquiao.

 Una historia sin final… aún

El empate entre Manny Pacquiao y Mario Barrios no resolvió nada de forma definitiva. En cambio, dejó el escenario listo para un posible segundo capítulo, uno que podría cambiar la historia del boxeo moderno. Mientras tanto, los aficionados se quedan con una noche intensa, emotiva y llena de boxeo del más alto nivel.

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