El presidente Andrés Manuel López Obrador presentó hoy un plan integral para combatir la escasez de agua en Nuevo León, asegurando que el abasto estará garantizado para la próxima década. Como parte de esta estrategia, el mandatario firmó un decreto para formalizar y reforzar las acciones necesarias para enfrentar la crisis hídrica en la entidad.

Entre las medidas anunciadas, se dispuso la totalidad del agua concesionada con el objetivo de atender de inmediato a 18 municipios del área metropolitana de Monterrey, garantizando el acceso a agua potable de calidad para sus habitantes. Esto permitirá que miles de familias cuenten con el recurso de manera continua y sin interrupciones.

Durante su conferencia, López Obrador enfatizó que ya no se otorgarán permisos de explotación de agua en zonas donde el recurso es escaso o en aquellas regiones donde la población ha crecido de manera acelerada. Con esta decisión, el gobierno busca un uso más eficiente del agua y evitar que su sobreexplotación afecte a la población en el futuro.

Uno de los proyectos clave dentro del plan presidencial es la construcción de un acueducto de 100 kilómetros desde la presa El Cuchillo, con un plazo de ejecución de tan solo ocho meses. Esta obra será fundamental para aumentar la disponibilidad del agua en la región y hacer frente a la demanda creciente del líquido vital.

Finalmente, el presidente reiteró su confianza en los gobiernos estatales y pidió que sean más cuidadosos al otorgar concesiones para el uso del agua, priorizando siempre el bienestar de la población. Con estas acciones, el gobierno busca garantizar la seguridad hídrica en Nuevo León y evitar futuras crisis.